Guardia Nacional fortalece la lucha contra el tráfico ilegal de especies silvestres con apoyo ciudadano
*A través de labores de ciberpatrullaje, análisis forense y denuncias ciudadanas, la Dirección General Científica impulsa acciones coordinadas para proteger la biodiversidad del país.
KARLA RIVAS
*A través de labores de ciberpatrullaje, análisis forense y denuncias ciudadanas, la Dirección General Científica impulsa acciones coordinadas para proteger la biodiversidad del país.
KARLA RIVAS
El coronel ingeniero en computación e informática de Estado Mayor retirado, Víctor Hugo Sánchez Huerta, explicó que la Dirección General Científica de la Guardia Nacional trabaja de manera constante en la prevención, detección e investigación del tráfico ilegal de especies silvestres, una problemática que afecta gravemente al medio ambiente y pone en riesgo el equilibrio ecológico del país.
Durante un recorrido por las instalaciones de la dependencia, el coronel detalló que dentro de esta dirección operan áreas especializadas como la Guardia Cibernética y el área de Criminalística, que en conjunto desarrollan una estrategia integral para combatir este delito. "Contamos con personal capacitado y con competencias certificadas para realizar labores de búsqueda en la red pública de internet, con el propósito de identificar publicaciones o contenidos que nos hagan presumir que se está cometiendo este delito", señaló.
El trabajo se centra en tres actividades principales. La primera es el ciberpatrullaje, mediante el cual expertos rastrean sitios, redes sociales y plataformas digitales para localizar anuncios, fotografías o mensajes relacionados con la venta o intercambio ilegal de especies silvestres. Una vez que se detectan indicios sólidos, el equipo presenta una denuncia formal ante la Unidad Especializada para la Investigación de Delitos contra el Medio Ambiente de la Fiscalía General de la República (FGR).
A partir de ese momento, explicó Sánchez Huerta, la Fiscalía puede continuar la investigación con sus propios recursos o solicitar la colaboración de la Guardia Nacional. En estos casos, la institución participa a través de investigaciones cibernéticas complementarias, con el objetivo de identificar perfiles, alias o cuentas vinculadas al tráfico de fauna, así como rastrear las redes de distribución que operan en línea.
La segunda línea de trabajo se desarrolla en el laboratorio forense de genética del área de Criminalística, donde se procesan indicios o muestras biológicas de las especies aseguradas. Gracias a técnicas de análisis molecular y comparaciones genéticas, los especialistas pueden determinar con precisión de qué especie se trata y confirmar si pertenece a una categoría en riesgo o peligro de extinción. Esta información se integra a las carpetas de investigación y fortalece el sustento técnico de los procesos judiciales.
La tercera acción clave es la participación ciudadana. El coronel subrayó que no toda la evidencia proviene de los operativos digitales, sino también de los reportes hechos por la población a través del número telefónico 088, el Sistema de Atención Ciudadana de la Guardia Nacional.
"Cualquier persona que detecte en internet contenido que le haga pensar que se están traficando especies en riesgo puede comunicarse al 088 y presentar un reporte. Nosotros recibimos esa información, la analizamos y, si procede, presentamos la denuncia ante la autoridad competente", explicó.
Sánchez Huerta enfatizó la importancia de fomentar la cultura de la denuncia, recordando que cada reporte puede marcar la diferencia para salvar especies amenazadas por el comercio ilegal. "En la Guardia Nacional siempre nos interesa fomentar la cultura de la denuncia. Invitamos a toda la ciudadanía a que, si detecta este tipo de contenidos, se comunique a través del 088. Nosotros atenderemos el caso y colaboraremos con las investigaciones correspondientes", afirmó.
El coronel destacó que la suma de esfuerzos entre la tecnología, la ciencia forense y la participación social ha permitido avanzar en la protección de la vida silvestre mexicana. "La colaboración ciudadana es fundamental. Cada reporte que recibimos es una oportunidad para actuar contra quienes lucran con la biodiversidad", dijo.
Con estas acciones, la Guardia Nacional refrenda su compromiso con la preservación de las especies silvestres, la defensa del medio ambiente y el fortalecimiento de la conciencia social frente a los delitos que atentan contra la naturaleza.
Durante un recorrido por las instalaciones de la dependencia, el coronel detalló que dentro de esta dirección operan áreas especializadas como la Guardia Cibernética y el área de Criminalística, que en conjunto desarrollan una estrategia integral para combatir este delito. "Contamos con personal capacitado y con competencias certificadas para realizar labores de búsqueda en la red pública de internet, con el propósito de identificar publicaciones o contenidos que nos hagan presumir que se está cometiendo este delito", señaló.
El trabajo se centra en tres actividades principales. La primera es el ciberpatrullaje, mediante el cual expertos rastrean sitios, redes sociales y plataformas digitales para localizar anuncios, fotografías o mensajes relacionados con la venta o intercambio ilegal de especies silvestres. Una vez que se detectan indicios sólidos, el equipo presenta una denuncia formal ante la Unidad Especializada para la Investigación de Delitos contra el Medio Ambiente de la Fiscalía General de la República (FGR).
A partir de ese momento, explicó Sánchez Huerta, la Fiscalía puede continuar la investigación con sus propios recursos o solicitar la colaboración de la Guardia Nacional. En estos casos, la institución participa a través de investigaciones cibernéticas complementarias, con el objetivo de identificar perfiles, alias o cuentas vinculadas al tráfico de fauna, así como rastrear las redes de distribución que operan en línea.
La segunda línea de trabajo se desarrolla en el laboratorio forense de genética del área de Criminalística, donde se procesan indicios o muestras biológicas de las especies aseguradas. Gracias a técnicas de análisis molecular y comparaciones genéticas, los especialistas pueden determinar con precisión de qué especie se trata y confirmar si pertenece a una categoría en riesgo o peligro de extinción. Esta información se integra a las carpetas de investigación y fortalece el sustento técnico de los procesos judiciales.
La tercera acción clave es la participación ciudadana. El coronel subrayó que no toda la evidencia proviene de los operativos digitales, sino también de los reportes hechos por la población a través del número telefónico 088, el Sistema de Atención Ciudadana de la Guardia Nacional.
"Cualquier persona que detecte en internet contenido que le haga pensar que se están traficando especies en riesgo puede comunicarse al 088 y presentar un reporte. Nosotros recibimos esa información, la analizamos y, si procede, presentamos la denuncia ante la autoridad competente", explicó.
Sánchez Huerta enfatizó la importancia de fomentar la cultura de la denuncia, recordando que cada reporte puede marcar la diferencia para salvar especies amenazadas por el comercio ilegal. "En la Guardia Nacional siempre nos interesa fomentar la cultura de la denuncia. Invitamos a toda la ciudadanía a que, si detecta este tipo de contenidos, se comunique a través del 088. Nosotros atenderemos el caso y colaboraremos con las investigaciones correspondientes", afirmó.
El coronel destacó que la suma de esfuerzos entre la tecnología, la ciencia forense y la participación social ha permitido avanzar en la protección de la vida silvestre mexicana. "La colaboración ciudadana es fundamental. Cada reporte que recibimos es una oportunidad para actuar contra quienes lucran con la biodiversidad", dijo.
Con estas acciones, la Guardia Nacional refrenda su compromiso con la preservación de las especies silvestres, la defensa del medio ambiente y el fortalecimiento de la conciencia social frente a los delitos que atentan contra la naturaleza.
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